Imagínate la playa ideal. Arena blanca, sol resplandeciente, mar turquesa… ¿Lo tienes? Ahora añade una sombrilla de paja y extiende los kilómetros de playa hasta más allá de lo que puedes ver, y tendrás el borrador de las playas más hermosas de Cuba. Y si lo primero que piensas es en Varadero y en que el concepto “todo incluido” no es lo tuyo, no desesperes: Cuba ofrece un abanico de posibilidades playeras, incluidas muchas sin necesidad de pulserita neón. El mojito, sin embargo, no es opcional.
Playas del Este
Si solo tienes unos días en Cuba y no planeas salir de La Habana, las Playas del Este son una escapada perfecta para, al menos, echar un vistazo al mar Caribe. A unos 20 kilómetros de la capital, Playas del Este son una suerte de Riviera cubana, en la que se mezclan pueblos pesqueros como Guanabo con semi-resorts como Bacuranao. En los meses de verano, Playas del Este recibe a casi la mitad de la Habana en masa: únete.
Playa Pilar
Si Piratas del Caribe se hubiese rodado en Cuba, Playa Pilar, en Cayo Guillermo, habría sido el escenario natural perfecto para las fechorías del Capitán Sparrow. Dunas de 15 metros ofrecen el escondite perfecto para el botín, y la costa no profunda invita a echar el ancla y celebrar con una botella de ron (o un daiquiri). Compruébalo. (No incluido: Johnny Depp).
Playa Maguana
La playa más famosa de Baracoa es el sueño de todo amante del mar. La superficie del agua se mantiene imperturbable a pesar de la constante suave brisa, e invita a los nadadores a echar un largo o varios. Los buceadores (amateurs o pros) pueden explorar la barrera de coral que se esconde a apenas 200 metros de la orilla. ¿El resto? Recostaos y lanzad un profundo suspiro: así de bien se está cuando se está bien.
Playa Pesquero
Si viniste a Cuba en busca del placer del “todo incluido”, pero prefieres algo más original que el mayor destino turístico del país, dirígete a Playa Pesquero. Este pequeño resort en la provincia de Holguín es el hermano menor de Varadero, pero no se le queda a la zaga. La oferta hotelera es más reducida, pero de igual calidad, y la playa no tiene nada que envidiarle: mar turquesas a temperatura ambiente, en las que puedes caminar medio kilómetro desde la orilla para que el agua te llegue… a la cintura.
Playa Ancón
A un tiro de piedra de la ciudad de cuento que es Trinidad está una playa no menos hechizante:Ancón, coronada de forma no oficial como la playa más bonita de Cuba. Y no sin razón. En Ancón, la arena no es blanca, es casi plateada, y los atardeceres son la representación natural de la experiencia cubana: inigualables e inolvidables.
Playa Sirena
Estos dos kilómetros ininterrumpidos de playa en Cayo Largo son una de las joyas de la costa sur de Cuba, en el que locales y turistas se mezclan en busca de aventuras acuáticas (se pueden alquilar kayaks y canoas en la misma playa) y sol perpetuo. Para extra privacidad, aprovecha su playa gemela, Playa Paraíso: más tranquila, pero igual de espectacular.
